Comienza la cuenta atrás para las elecciones y, como viene siendo habitual, será un año en el que los ayuntamientos gastarán las reservas de tesorería en bienes y servicios para preparar sus ciudades lo mejor posible. Esto implica el lanzamiento de decenas de miles de concursos públicos en toda España al que miles de nuevas empresas, organizaciones y autónomos podrán optar.
Y como cada vez viene siendo mas frecuente, las administraciones requieren que aquellas organizaciones que quieran ser proveedores del Estado, en cualquiera de sus formas de representación (Nacional, Regional o Local) dispongan de unas mínimas garantías económicas y técnicas, siendo uno de los protagonistas el Certificado de Calidad ISO.
Pero porqué se exige este requisito a las organizaciones que desean contratar con la Administración? Varios son los motivos, aunque los reduciremos a 3:
1.- Exigir que un proveedor tenga implantado un Sistema de Gestión de la Calidad ISO 9001 supone exigir que el proveedor tena una estructura mínima de administración y control de sus actividades.
2.- Disponer de un Sistema de Gestión de la Calidad ISO 9001 supone exigir que el proveedor controla sus desviaciones / incidencias, y que dispone de procedimientos para actuar en caso de que se produzcan.
3.- Y la mas importante, exigir el Certificado ISO 9001 de Sistemas de Gestión de la Calidad supone que un tercero independiente (Entidad de Certificación), ha visitado, auditado y verificado que dicho proveedor dispone de una estructura mínima para prestar los servicios que aparecen en su certificado y que, además, los realiza de forma normal y continuada.
Por tanto, mas allá de parecer un «capricho» o un «impuesto revolucionario» a las empresas que deseen optar a concursos públicos, es una forma adicional, sobre todo en procesos de bajo importe, de fijar unas garantías mínimas de existencia y operatividad a las empresas que van a optar a contratar con la Administración (o con un gran cliente).
La Certificación de calidad ISO 9001 vuelve a ocupar, tras varios años de frenada motivada por la crisis, un lugar preferente en el mercado como elemento diferenciador entre las empresas que operan en cualquier sector. Si aún no dispone de un Sistema de Gestión de la Calidad ISO 9001 implantado y certificado, no retrase la decisión, pues además de diferenciarse de sus posibles competidores, gracias a esta herramienta de gestión dispondrá de un importante apoyo en el día a día de su organización y, por supuesto, la posibilidad de optar a contratar con la Administración.